Nadie me puso alas, pero aprendi a volar..
No detuve sus balas, pero aprendi a esquivar!



2 comentarios:

dijo...

Siempre hay una segunda opción, tal vez no es la más sencilla pero terminas haciéndolo.

Besos

Sandra Herrero dijo...

En esta vida terminamos aprendiendo de los errores para evitar volver caer en ellos. Besos :)